Patologías de Riñón

volver al menu de Patologías

Cáncer de Riñón

EL cáncer renal es una formación tumoral que se origina directamente en el riñón. La mayoría nacen de la corteza del riñón y se denomina cáncer de células renales. Existe otro cáncer que se origina en la vía excretora que se denominan tumores de urotelio y que se producen en los cálices, pelvis renal o uréter y tienen otro origen y tratamiento. En este apartado nos referiremos solamente a los tumores que se originan en la corteza renal. El tipo más común de cáncer renal en el tumor de células claras y menos frecuente los tumores papilares o cromófobos.

Actualmente la mayoría de los tumores renales diagnosticados son asintomáticos y son hallazgos de estudios ecográficos realizados por controles o por estudios de otras causas. El síntoma más común es la hematuria o el hallazgo de sangre microscópica en una muestra de orina. Menos frecuente es el dolor o la masa palpable abdominal. En algunos casos se diagnostican por la presencia de síntomas relacionados con metástasis.

Los factores de riesgo relacionados con la enfermedad pueden ser tabaquismos, hipertensión arterial, alto ingreso de grasas, obesidad, exposición a ciertas sustancias como el asbesto y cadmio. Antecedentes genéticos de cáncer de próstata y algunas enfermedades hereditarias como el síndrome de Von Hippen Lindou, carcinoma papilar hereditario también predisponen al cáncer de riñón.

La mayoría de los casos se diagnostican incidentalmente en un estudio de ecografía realizado por otros motivos. En estos casos la mayoría de los estadios son tempranos. En caso de sospecha de tumor renal se puede realizar una tomografía axial computada o resonancia nuclear magnética.

Tratamiento

Cirugía

La cirugía es el tratamiento más común en el cáncer de riñón y en la mayoría de los casos es el único tratamiento necesario. El tipo de cirugía dependerá del tamaño y de la ubicación del tumor. En muchos casos cuando el tumor es igual o menor a 4 centímetros se puede realizar una cirugía parcial (nefrectomía parcial). En otros casos es necesario realizar la extirpación completa del riñón (nefrectomía radical)

La cirugía se puede realizar a cielo abierto a través de una incisión o por técnica laparoscópica. Las vías de abordaje dependerán de las características del tumor y de la experiencia del cirujano. En algunos casos es necesario realizar la extirpación de los ganglios regionales o abordajes en la vena renal inferior o la vena cava inferior ya que algunos tumores pueden tener trombos que incluso pueden extenderse a la aurícula derecha del corazón. También se pueden operar las metástasis del tumor especialmente hepáticas o pulmonares. El tipo de cirugía dependerá de las características y extensión del tumor y los especialistas del CDU evaluarán cada caso individual para ofrecerle la mejor posibilidad de tratamiento:

Inmunoterapia: Estas drogas estimulan el sistema inmunitario con la finalidad de actuar contra el tumor como el interferón y la interleukina 2.

La Quimioterapia hasta el momento no ha dado grandes resultados en el tratamiento del cáncer avanzado de riñón cuando se detectan metástasis.

Nuevas drogas se han desarrollado en los últimos años para el tratamiento del cáncer renal avanzado que inhiben la formación de vasos sanguíneos que necesita el tumor para vivir y desarrollarse. Estas drogas son el sorafenib (Nexavar®), sunitinib (Sutent®), temsirolimus (Torisel™), everolimus (Afinitor®), y una combinación de interferon con bevacizumab (Avastin®). Los médicos discutirán con el paciente el mejor esquema terapéutico para cada caso.

Cáncer de Uréter

El cáncer de uréter se origina en las células que recubren el interior del conducto por donde se transporta la orina desde el riñón a la vejiga.

El cáncer de uréter es poco frecuente y generalmente se presenta con más frecuencia en adultos mayores y en personas que padecen o han padecido cáncer de vejiga debido a que las células que revisten los uréteres son similares a las células que recubren el interior de la vejiga. Las personas con diagnóstico de cáncer de uréter tienen un riesgo mayor de padecer cáncer de vejiga, por lo tanto, es necesario realizar estudios para descartar la presencia de cáncer de vejiga.

Los síntomas más habituales son la presencia de sangre en orina (hematuria), dolor por un factor obstructivo, un hallazgo de una dilatación urinaria en una ecografía.

El tratamiento del cáncer de uréter generalmente es quirúrgico pudiendo realizarse cirugías parciales o en algunos casos se requiere la extirpación completa del uréter y el riñón. En casos seleccionados pueden realizarse tratamientos endoscópicos con láser. En algunos casos puede ser necesario un tratamiento con quimioterapia.

Infección renal o Pielonefritis

La infección renal, también conocida como pielonefritis, consiste en cuadro infeccioso que afecta al riñón, siendo una urgencia urológica que debe ser tratada en forma inmediata ya que puede generar un cuadro infeccioso grave.

Puede tener síntomas variados pero lo más característico es el dolor lumbar asociado a fiebre alta. Puede acompañarse de escalofríos, dolor abdominal y síntomas urinarios bajos como ardor miccional, mayor frecuencia y urgencia y una orina más turbia o mal olor o con sangre.

Es muy importante en primer lugar tomar una muestra de orina y realizar un cultivo de orina para determinar el tipo de germen y los antibióticos que son sensibles a este. Una vez tomada la muestra de orina se inicia el tratamiento con antibióticos habituales para las infecciones de la vía urinaria. Una vez que se tienes los resultados de este análisis se evalúa si se continua con el mismo antibiótico o debe ser cambiado por otro que sea sensible. El tiempo de antibiótico será evaluado por tu médico de acuerdo con la gravedad del caso.

En algunos casos tu médico puede solicitar una ecografía renal o una tomografía computada de abdomen.

En casos graves donde la infección no cede o genera mucha sintomatología puede ser necesaria la internación y tratamiento con antibióticos por vía endovenosa.

Quistes Renales

Los quistes renales son formaciones membranosas de contenido líquido y paredes finas de características benignas. En general son asintomáticos y generalmente se detectan en algún estudio de imágenes como una ecografía, tomografía computada o resonancia magnética de abdomen.

Habitualmente no producen síntomas. En algunos casos, especialmente cuando son muy grandes, pueden ocasionar dolor lumbar o producir una obstrucción de la vía urinaria. En algunos casos pueden infectarse y generar temperatura alta y dolor marcado.

La mayoría se denominan quistes simples teniendo una pared delgada y fina y contenido líquido.

En los casos donde la pared es gruesa o irregular y existen formaciones densas o tabiques en su interior es necesario realizar estudios adicionales para descartar un cáncer renal.

En la mayoría de los casos los quistes renales no requieren tratamiento y solamente se controlan. En casos poco frecuentes se requiere un procedimiento quirúrgico para extirparlos.

Litiasis renales y ureterales

La litiasis renal, son depósitos de minerales y sales que se forman dentro de los riñones. En general, las litiasis se forman cuando la orina se concentra, lo que permite que ciertos minerales como el oxalato de calcio o ácido úrico entre otros se cristalicen y se unan entre sí. Al mismo tiempo, la orina puede carecer de sustancias que impidan que los cristales se adhieran unos a otros, lo que crea un entorno ideal para la formación de litiasis renales.

Las litiasis renales tienen muchas causas y pueden afectar cualquier parte de las vías urinarias, desde los riñones hasta la vejiga. En general, las litiasis se forman cuando la orina se concentra, lo que permite que los minerales se cristalicen y se unan.

Una litiasis urinaria puede no causar síntomas hasta que comienza a desplazarse por el riñón o hasta que pasa por el uréter (el tubo que conecta el riñón y la vejiga) y provocar un dolor intenso conocido como cólico renal. Este se manifiesta por un dolor intenso en región lumbar que puede irradiarse al flanco, región inguinal e incluso a los testículos en el hombre. Este dolor puede ser muy intenso y fluctuante con episodios de mayor y menor dolor. Suele generar dolor abdominal, a veces náuseas y vómitos y algunas molestias para orinar como ardor, urgencia y frecuencia miccional. Puede ocasionar micción rosada o rojiza por la presencia de sangre en la misma. Cuando se acompaña de infección urinaria puede dar fiebre y mal estado general. Los síntomas pueden variar de acuerdo con la ubicación de la piedra en la vía urinaria y a veces puede ceder el dolor a pesar de no haberse eliminado el cálculo.

Los estudios que habitualmente se solicitan inicialmente son:

Análisis de sangre, para evaluar la existencia de sustancias que pueden promover la producción de una litiasis

Análisis de orina, para evaluar la existencia de ciertas sustancias que pueden promover la generación de una litiasis. Además, puede estar asociada a una infección urinaria.

Ecografía renal y vesical, se puede detectar la presencia de litiasis a nivel renal o en la parte inferior de los uréteres o dentro de la vejiga. Además, puede observarse una dilatación de la vía excretora por obstrucción de una litiasis en el uréter.

Radiografía simple de abdomen, puede detectar la presencia de una litiasis con contenido cálcico.

Tomografía axial computada de abdomen y pelvis sin contraste, es el método ideal para detectar la presencia de una litiasis.

Estudio metabólico de litiasis urinaria. Este estudio se solicita para evaluar los factores predisponentes que pueden generar la producción de una litiasis. Se pueden determinar los niveles de calcio, ácido úrico, cistina y otras sustancias que pueden producir litiasis. También se pueden detectar sustancias cuya disminución pueden favorecer un medio adecuado para que se forme una litiasis. Es un estudio que requiere la recolección de orina de 24 horas. Este estudio nos permitirá evaluar la necesidad de medicarte con algunas sustancias que ayudaran para la prevención de la formación de nuevas litiasis.


Los tratamientos variarán de acuerdo con las características, tamaño y ubicación de las litiasis.

  • 1. En algunos casos se las puede controlar sin un tratamiento específico.

  • 2. Colocación de catéter doble J. En algunos casos de urgencia especialmente un cólico renal que no cede o ante la presencia de fiebre u otras circunstancias es necesario colocar un catéter dentro del uréter por vía endoscópica bajo anestesia general. Un extremo del catéter se deja en el riñón y el otro extremo en la vejiga. Este procedimiento permite drenar adecuadamente la orina eliminando la obstrucción que genera la litiasis. En un segundo tiempo se realiza el tratamiento definitivo.

  • 3. Litotricia extracorpórea, es un procedimiento donde se utilizan ondas de choque de generación electromagnética que se focalizan en la litiasis ya sea en forma ecográfica o por imagen radioscópica, provocando la desintegración de esta y pueda eliminarse en forma espontánea a través de la orina. Puede requerir más de una sesión y son ideales para las litiasis localizadas en el riñón de menos de 2 cms. Se realiza ambulatoria con una ligera sedación. También puede utilizarse en algunos casos donde la litiasis está ubicada en la parte inferior del uréter cercano a la vejiga.

  • » 4. Procedimientos endoscópicos, denominados litotricia ureteral donde bajo anestesia general se puede alcanzar la litiasis con instrumentos especiales y desintegrar las piedras con diferentes fuentes de energía como el láser(Láser de Holmium), ultrasonido o neumático. En la mayoría de los casos hay que dejar un catéter interno denominado catéter doble J que se introduce dentro del uréter quedando un extremo en el riñón y el otro en la vejiga. Esto permite un drenaje de orina adecuado luego del procedimiento. Este catéter se retira aproximadamente a la semana.
  • OSDE
  • Accord Salud
  • OMINT
  • Swiss Medical
  • Prevencion Salud
  • Obra Social del Personal Gráfico
  • Obra Social de Seguros
  • OSDIPP
  • Luis Pasteur
  • Centro Médico Pueyrredon
  • Galeno
  • Avalian
  • Colegio de Escribanos
  • APM
  • Sadaic
  • APSOT
  • medife
  • Docthos
  • OSPJN
  • OPDEA
  • SMAI
  • MITA